El problema de Iker lo tiene con Florentino.
Este no le ha perdonado la llamada cargada, por cierto, de sentido común a sus compañeros Xavi y a Pujol.
No le ha perdonado la rajada de la Carbonero poniendo negro sobre blanco lo que todo el mundo sabía del vestuario.
Y lo más importante, le acusa del fracaso del proyecto Mou al que Floren apostó a muerte cargandose toda la estructura del Club.
El calzonazos del Angeloti, sólo sigue ordenes extradeportivas, y me parece que lo pagará caro.
Roma no paga traidores.