PARA LOS CREADORES DEL VILLARATO DESDE LA MESETA CENTRAL.
“No nos ha dejado estar cerca del rival”, se lamentaba José Aurelio Gay, entrenador del Zaragoza. El técnico maño, muy coherente en sus manifestaciones y también en sus quejas, recordaba que el colegiado lo había permitido en el derby barcelonés pero no a ellos y había transcurrido sólo una semana. Y es que el ‘villarato’ no sólo perjudica al Barcelona, el ‘efecto colateral’ castiga a otros equipos como el sábado le pasó al Zaragoza.
Gay fue, decimos, muy coherente en sus manifestaciones. Reconoció que la acción de Contini era merecedora de tarjeta roja, pero también explicó que Sergio Ramos debió ser expulsado cuando cometió penalty, pues era el último defensor, sobre Adrián Colunga. Undiano Mallenco no señaló la pena máxima y, claro, el defensa madridista continuó en el terreno de juego.
El Madrid no puede quejarse de Mallenco en La Romareda. Acertó al expulsar a Contini por darle un codazo a Higuaín -el argentino le echó mucho teatro porque el impacto fue en el pecho y se llevó las manos al rostro-, pero en la misma acción su auxiliar tuvo que ver como Sergio Ramos le soltaba un golpe por detrás a Ander Herrera con el juego detenido. La tarjeta roja quedó en nada... Otro logro del ‘villarato’.
El derby de Cornellà acabó con un expulsado, Dani Alves; en La Romareda también hubo un expulsado, Contini. Sustancial diferencia cuando, además, Undiano Mallenco no permitió el pasado sábado el fútbol de choque que si dejó desplegar en el derby catalán.