LA ENFERMEDAD de Chagas, conocida médicamente como tripanosomiasis sudamericana, debe su nombre a su descubridor, el médico brasileño Carlos Chagas, quien en 1909 logró aislar un organismo parásito microscópico llamado Trypanosoma. Es una enfermedad difícil de diagnosticar, pues después que estos parásitos unicelulares se introducen en la corriente sanguínea humana, la mayoría sale de la sangre y se oculta en las células corporales, lo que dificulta su detección.
Una vez dentro de la célula anfitriona, los tripanosomas se multiplican rápidamente, pero los síntomas de la enfermedad no son los mismos en todos los casos. Algunas personas no presentan ningún tipo de síntoma que indique que son portadoras de la enfermedad, pero en otras se detectan enseguida daños irreversibles en el bazo, el hígado, los nódulos linfáticos y hasta el cerebro. Además, en Sudamérica, la enfermedad de Chagas constituye la principal causa de muerte por fallo cardiaco en las personas menores de cuarenta años. Todavía no existe ningún fármaco para combatir esta enfermedad, pero el Imperial College de Londres (Inglaterra) trabaja activamente en el campo de la investigación molecular con el fin de descubrir algún producto eficaz.
Según la Organización Mundial de la Salud, en América del Sur y Central hay 90 millones de personas expuestas al riesgo de contraer la enfermedad de Chagas, y otros 18 millones más ya están infectados. ¿Cómo se transmite esta dolencia? Al hombre se la pueden transmitir los perros y los gatos, pero el agente transmisor más corriente es la vinchuca, o chinche alada, un insecto hematófago llamado también “el asesino†o “el barberoâ€, porque se deja caer sobre su víctima durante la noche y le pica en la suave piel del rostro, generalmente alrededor del cuello o de los ojos, para alimentarse de su sangre.
La picadura de este insecto es indolora. Una vez repleto de sangre, deposita sus heces infectadas sobre la víctima. Cuando estas penetran en la herida abierta, bien sea por los movimientos del propio insecto o porque la persona quizás se rasque sin saber que ha recibido una picadura, la sangre se contamina. Aunque parezca increíble, se dice que algunos mexicanos todavía comen parásitos hematófagos como afrodisiaco, y así contraen directamente la enfermedad.
La enfermedad de Chagas, llamada enfermedad de la miseria, normalmente es endémica de regiones pobres, donde las vinchucas se multiplican en las grietas que se abren en las paredes de barro de las chozas. Pero en años recientes también se ha difundido en ciudades prósperas, como Río de Janeiro. ¿Por qué razón? Porque gente infectada por la enfermedad procedente de las regiones rurales acude a la ciudad para donar sangre. Todos los años se informan en Brasil miles de casos nuevos de personas que han contraído la enfermedad de Chagas como resultado directo de una transfusión de sangre infectada. Los trabajadores sudamericanos que emigran a Estados Unidos están siendo una causa de preocupación, pues algunos de los bancos de sangre de ese país ya han sido contaminados por la enfermedad de Chagas.
Otro dia os hablare de la osceocorosis o "ceguera de los rios" que se desarrolla en áfrica, para todos los que vais a pescar por alli.