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Ramón Plana

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Posts publicados por Ramón Plana

  1. HUNDIMIENTO EL INVIERNO DE 1981

    En una situación muy parecida la vuestra.

    Un amigo, que casualmente era el que me había iniciado al submarinismo, se vino al estreno de mi pequeña lanchita GLASTRON V142 (de segunda mano) con un mercury fueraborda de 40HP que había comprado a plazos.

    El vino con un amigo y yo traje otro. En total cuatro personas con cuatro bibotellas y cuatro equipos completos en una lanchita de 4 mts.

    Fuímos al brut de Torredembarra. Al bajar el agua estaba tranquila, pero al acabar la inmersión estaba muy movida.

    Subimos por la popa mientras las olas nos hacían cabecear de forma muy pronunciada.

    Cuando la popa bajaba casi que se metía bajo el agua.

    Nadie tuvo la prudencia de desplazarse a proa para compensar los pesos, y mucho menos yo que era un pardillo sin experiencia.

    Fuí el último en subir, y al hacerlo el barco empopó alarmantemente. Para acabarlo de arreglar, mientras trepaba por la escalerilla de popa, en uno de los cabezazos, las cuatro bibotellas que llevábamos apoyadas, en vertical a los asientos de popa se cayeron más hacía popa, empotrándose en la pequeña sentina que hay justo tocando la parte interna del espejo de popa, que creo recordar es donde estaba la batería.

    Acto seguido la popa se hundió en el agua y el mar entró en la lanchita en apenas unos segundos en forma de una ola imparable que no nos dió tiempo a nada.

    La barca se hundío envidentemente por la popa, pero no llegó a desparacer, si no que emergío de nuevo elevada por una cámara de aire que quedó atrapada en la proa.

    Una vez todos en el agua, aturdidos, viendo que no había nadie por los alrededores, que todos nadábamos muy bien y que la costa apenas estaba a media milla decidieron ganarla a nado.

    Yo decidí quedarme agarrado a la barca, que dejaba escapar, en forma de un agudo silbido, un hilillo de de aire por un agujero que tenía en la proa, por lo que la barquita cada vez se hundía más.

    Acababa de estrenar la barquita, y a pesar de ser usada tenía muchos meses de plazos por delante para pagarla y no estaba dispuesto a dejarla hundir.

    Cuando al cabo de cinco horas consiguieron venir a rescatarme con un barco desde Tarragona, tenía el chaleco inflado a tope y con la mano derecha apuntando al fondo del mar tenía agarrada a mi lanchita recién estrenada por su cornamusa de proa, la cual intentaba con todas sus fuerzas tirar de mi hacía el fondo.

    Gracias a mi chaleco pude aguntar hasta la llegada de ayuda.

    Ataron una fuerte cabo a la lanchita, me izaron a bordo y arrastramos mi barquita hasta la costa, donde un gentío nos esperaba y nos ayudaron a sacarla del agua tirando entre todos de un cabo (Una barquita llena de agua, aunque solo tenga 4 mts pesa como un elefante).

    Mis amigos, que perdieron sus equipos de inmersión, incluido el mío que me lo habían prestado (solo recuperaron una parte de los mismos) las pasaron canutas, pues no encontraban quien pudiera o quisiera venir en nuestra ayuda.

    En un puertecito cercano, del que no voy a decir el nombre para evitarme problemas, a pesar de la insistencia de mis amigos se negaron a venir en mi ayuda por que la neumática del puerto estaba estropeada y no querían coger ninguna de las muchas barcas allí amarradas al no tener el permiso de sus dueños. Por mucho que mis amigos les insistieron en que era una causa de fuerza mayor, no les hicieron el menor caso y no tuvieron más remedio que parar un coche en la carretera que les llevó hasta Tarragona, y desde allí tuvo que salir un barco que fué el que, cinco horas después del naufragío, me recogió.

    Otro día, cuando tenga tiempo, os explicaé más anectodas, la mayor parte fruto de la falta de experiencia o de barcos demasiado viejos y baratos, pues tengo un montón de desgracias que explicare que quizás puedan ser útils a los que ahora se incian.

  2. PERDIDA PENOSA.

    Ya sabíamos que la previsión para este domingo, especialmente por la tarde, era mala. Por este motivo no nos hemos atrevido a bajar a sitges ni tampoco subir a mataró, que son los dos lugares que más nos hubiera gustado visitar por los resultados que nos están dando, pero finalmente nos hemos quedado por los alrededores de Barcelona por que, al margen de la lluvia que no paraba, el agua estaba bastante agitada.

    La sonda cantaba bastante pescado, pero no picaban.

    Por este motivo, cuando ya debían ser cerca de las 5:30 de la tarde hemos decidido, al ver que los grandes no picaban, acercarnos a la costa, para ver de pescar algún jurelito o barat.

    Cuando ya habíamos perdido toda esperanza de pescar nada hemos tenido una picada brutal en la caña mas heavi de las que llevamos a bordo, con una línea de nilon de 1 mm y bajo de fluorocarbono del 0,60, con un rapalita de 13 cms, con un plomito de 20 grms justo antes del fluorocarbón.

    No sabemos que había al otro lado de la línea, pero la picada ha sido muy fuerte y Amador se las ha visto y deseado para acercar el bicho al barco, y esto que el equipo al que ha picado consta de una buena caña de altura y carrete Okuma con desmutiplicador, un equipo realmente exagerado para pescar tan cerca de la costa y muy resistente.

    La pieza, fuere lo que fuere, se resitía, aflojando cuando venía hacía el barco y dando la punta de la caña sus buenos cabezazos cuando decidía alejarse. Cuando ya faltaba poco para que el bajo llegara al barco la pieza a empezado a tirar hacía abajo, con la mala fortuna que el el hilo se ha ido por la roda y, finalmente, a pesar de nuestros esfuerzos, ha petado.

    Lo lamento por la desilusión de Amador, y también por la pieza que se ha largado con no menos de 15/25 mts de hilo y un artificial colgando.

    Que le vamos a hacer. Hay días que triunfas y otros que fracasas.

    Como estaba convencido que subiríamos la pieza a bordo, cuando he calculado que faltaba poco he empezado a filmar con mi cámara de fotos digital (Mi cámara de fotos solo puede grabar 80 segundos en modo video) que en lugar de filmar la subida de la pieza han filmado muestra decepción al ver que el hilo se metía bajo el barco justo antes de petar.

    He colgado el video en LiveVideo por si queréis llorar con nosotros (o reiros de nosotros, lo que prefiráis).

    PICADA PERDIDA

    http://www.livevideo.com/video/A523BF1EB26...ena-picada.aspx0

  3. Mañana vamos a probar suerte de nuevo, en este ocasión acompañado de Amador, experto Lubinero al que he conseguido mosquear considerablemente :lol: (de buen rollo) con mis técnicas chapuceras (pero efectivas) de ir costeando con la cabeza metida en el agua y liarme a mordiscos con todas las Lubinas más grandes de 3 Kgs que pasen por debajo del barco :052: .

    Mañana vamos a comprobar, definitivamente, si es que de verdad finalmente he logrado insertar en mi única y deteriorada neurona algunas técnicas depuradas y selectivas para la pesca de la Lubina o es que símplemente en mis salidas al pirineo para acompañar a mi hijo a practicar snowboard (como buen hijo de pescador acérrimo no le gusta nada la pesca y le horrorizan los barcos) algún día debí pisar una enorme mierda de vaca sin darme cuenta, y quizás por esto me persigue la suerte de forma insistente. Pero para tanta suerte, la mierda debería haber sido enorme y llegarme al cuello, y la verdad es que no recuerdo haber pisado ninguna.

    En cualquier caso, por favor, no me despertéis de este sueño Lubinero que, me temo, se acabará en cuenta me despierte...

    Por cierto, me he llevado la cámara al barco y se han acabado las fotos cutres del mobil. Si sucede algo de interés Amador y yo os prometemos fotos aceptables.

  4. En esta cruzada Lubinera esta vez he bajado hasta sitges, a un lugar al que, desde tierra, le tengo mucho aprecio para hacer spinning y donde he cogido en años anteriores más deuna captura.

    En esta ocasión un llubarrito practicamente del mismo peso que el anterior, 3.8 kg.

    Lo limpié en el mismo barco para regalalárselo ya limpio a una prima mia a la que le gusta mucho el pescado, y en su interior (el del llubarito, no el de mi prima :ok: ) encontré también un montón de pescados de mediano tamaño a medio digerir, no menos de cinco unidades.

    Como la verdad es que no se que santo he besado para tener tanta suerte, como es el tercero en menos de dos semanas este he querido disfrutarlo más y me he puesto el soporte de cintura y no me he esperado a que el pez se cansara, si no que lo he traido inmediatamente a la vera el barco para verlo luchar.

    La verdad es que pasados los primeros minutos se ha rendido fácilmente. Tan solo al ver el barco se ha revitalizado un poco y me ha hecho sufrir al meterse debajo de la popa, pero sin consecuencias (supongo que mi buena racha continúa).

    Espero que San Pescador Bendito me conserve esta buena racha unos días más y que después no me tenga tres años a régimen como pago por mis capturas :untitled: .

    En la foto de la izquierda (lo siento, son fotos de teléfono) el pez aún está vivo, recién pescado, y lo estoy pesando. En la de la derecha ya lo tengo limpio y descamado.

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  5. Tenía que ir al barco para retirar la cerradura, que se había estropeado, y llevársela al cerrajero. Cuando he llegado y visto el mar tan tranquilo y aquel sol tan brillante no he logrado contenerme y he salido una horita a pasear los artificiales. Y ha caído otro lubarrito. En este caso dió en la eléctrica 3,750 kgs. Este ha luchado mucho más que el anterior. Como notaba que el pez tiraba fuerte, estaba solo y no quería correr el riesgo de perderlo y enviarlo al fondo malherido si intentaba acercarlo al barco demasiado pronto, he decidido arrastrarlo durante diez minutos antes de sacarlo. Finalmente he tenido que ayudarme del gancho para subirlo. Este llubarro, al igual que el anterior, se había tragado el artificial en su totalidad. Lamento no haber podido compartir el momento con mis "marineros" habituales, pero prometo nuevas oportunidades.

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  6. Claro, ahora lo entiendo. Está bien pensado este inventillo. En cuanto pueda me miraré los manuales, aunque según lo que valgan supongo que también puedo atar la lenteja a una bita del barco con un cabo fino marcado cada dos o cinco metros. Puedo bajar la lenteja hasta el fondo, mirar en la sonda que profundidad hay en aquella zona y subir los metros que me interesen para llegar a donde vea el pescado. Será un poco rústico, pero para probar ya me vale. Gracias amigos.

  7. Por cierto... Con una lenteja de 3 a 5 kgs al final del profundizador... ¿Se nota la picada del pez si este es modesto (de 1 a 5 kgs, por ejemplo)?. A priori pudiera parecer que, debido al enorme peso de la lenteja y al efecto péndulo del mismo junto con la línea, la picada del pez podría pasar desapercibida

    ¿Cuantos metros dejáis desde la lenteja hasta el artificial?

    Perdonar tantas preguntas, pero veo que vosotros sabéis de que va el tema y quisiera aprovecharlo para aprender un poco.

    He mirado precios de profundizadores (eléctricos) y van desde los 600 hasta los 2500 € (aproximadamente).

    Para mi, hoy por hoy, prohibitivo, pero más adelante me gustaría comprar uno.

  8. Supongo que un profundizador es un ingenio electrónico parecido a una caña de pescar pero preparado para bajar y subir grandes pesos y además medir con más o menos precisión la línea que sueltas. ¿Es así?. He visto este tipo de apartos expuestos en alguna tienda, pero no sabía muy bien para que servían. Supongo que es evidente que para bajar sin problemas es necesario un gran peso y para ello se necesita un sistema potente que lo soporte. Seguiré vuestro consejo y lo compraré cuando me lo pueda permitir, pero ahora me es imposible con los gastos que ya tengo asumidos. Os agradezco mucho vuestros buenos consejos con los que, además, estoy totalmente de acuerdo.

  9. Por lo que dices, con un rapala y Dracón Plomado cada 9 metros aproximadamente baja uno. Esto quiere decir que para que me baje a 20 mts de profundidad debo soltar unos 180 mts de dracón plomado. ¿Es así?. No sé si sería muy práctico llevar una línea tan largar tras la popa, pero si el Dracón no es muy caro lo probaré..

  10. No tengo mucha experiencia en el curricán a fondo y os agradecería mucho que me aconsejéis cual es el sistema más práctico y efectivo para hacer que una línea baje hasta una profundidad de unos 20 mts mientras curricaneas a unos 4 nudos de velocidad.

    Primero probé con plomos pequeños, de unos 50 grms, que se abrazan a la línea: Funcionan bien pero no bajan demasiado.

    Después probé con plomos de 150 gramos que se cuelgan de la línea: Bajan más, pero tampoco mucho, y me da la impresión que tienen más tendencia a acercarse hacia el centro de la estela del barco y liarse con las otras líneas.

    Después probé con un patín verde con un plomo en su punta. Se puede graduar el ángulo de entrada y salida, pero no me gusta por que los artificiales que uso tiran mucho y hacen que se levante.

    ¿Que usáis vosotros?. He visto unos patines metálicos, en tres tamaños diferentes, que además se supone que cuando el pez pica hacen que se levante el artilugio, pero en mi caso, con los MAGNUN grandes que uso sospecho que el tiro también hará que se levante el patín, a no ser que use el patín más grande de todos.

    Os agradecería vuestra opinión.

  11. Gracias a todos amigos.

    Venga Amador.. no seas pelotero tio.... :ok: que casi todos nos hemos enterado que en cuatro días te has marcado cinco lubis. Por cierto ¿No vas a subirnos ninguna foto?

    Me gustaría que este sábado me acompañaras a batir la zona donde pillé el monstruo, pero no sé que tiempo nos hará. Mañana nos vemos y lo comentamos.

  12. NUEVO POST

    A pesar que ya tengo un post en PARTE DE CAPTURAS de SPINNING (que si queréis podéis visitar), como ahora también voy a ir saliendo en barca inicio una nueva sección en PESCA EMBARCADOS.

    ESTRENO

    Esta mañana, acompañado de mi tio hemos estrenado mi embarcación. ¡Y vaya estreno que hemos tenido¡. Estamos más contentos que Aznar en las Azores.

    Hemos salido a eso de las 8 del Port Fórum y hemos estado haciendo un mix. Un poco de curri, un poco de jigging e incluso hemos estado cerca de una horita pescando con volantín entre dos aguas con sardina siguiendo los pequeños bancos que nos aparecían por la sonda. A eso de las 11 hemos pescado un pequeño túnido de cerca de 1 kg de peso que era como un BARAT pero bastante más grande y de una tonalidad más verdosa. No he podido hacerle foto.

    Al mediodía, cuando ya volvíamos a puerto, hemos tenido una picada brutal aproximadamente a una milla a levante del Port Fórum, en un veríl de unos 25/30 mts. A pesar de la brutalidad inicial de la picada, que ha arqueado una potente caña de fondo durante cerca de un minuto, la recojida ha sido más bien suave y sin demasiados tirones.

    Supongo que habrá ayudado el hecho de que afortunadamente en aquella caña tenía montado un carrete de tambor, especial para grandes pesos.

    Estaba usando un monofilamento amarillo creo que del 0,80 y 3 mts de bajo de Fluorcarbono del 0,50. Al final, un MAGNUM de cuerpo blanco y cara roja de 20 cms. Como decía, no me parecía que el pescado tirase demasiado, de hecho, ha habido algún momento en que estábamos convencidos que se había desenganchado, pero cuando tensaba la línea con los dedos podía apreciar que, aunque no había lucha, se notaba un peso importante.

    He tardado unos minutos en recojer, ya que en aquella línea había dejado cerca de 80 mts de hilo. Al final, cuando hemos visto platear a unos 5 mts por debajo del barco aquella mole ya nos hemos empezado a poner nerviosos. Inicialmente pensábamos que era un Tallahams, pero ha resultado ser un Llubarrote de los buenos.

    No podíamos subirlo directamente por que nuestro franco bordo es un poco alto para agarrar con comodidad el pez por las agallas y por otro lado el hilo nos dañaba las manos debido al peso del pez, así que decidimos usar el salabre. Mientras mi tio lo preparaba, yo mantenía la cabeza del pez fuera del agua. No se resistía. Apenas si daba algunos bandazos a uno u otro lado. Finalmente, ya a bordo de la EBBA (es el nombre de nuestra barca en honor a mi mujer) hemos podido comprobar que el muy glotón se había zampado el MAGNUM prácticamente por entero, y que la potera trasera se le había clavado en la garganta, en la base del cuello justo donde termina su lengua. Supongo que esto habrá hecho que el pobre animal haya llegado al barco prácticamente desangrado y sin fuerzas para luchar. De hecho al embarcarlo aún sangraba mucho, pero apenas han trancurrido unos cinco segundos, la sangre ha dejado de brotar, como si ya no le quedara más.

    Con la báscula electrónica hemos comprobado, in situ, un peso de 5,350 kgs.

    En casa, con tranquilidad, antes de dejar preparada la lubina para el horno me he entretenido en inspeccionar lo que traía en el estómago, y os he tirado una foto para que lo podáis ver. Se había zampado dos peces de unos 20 cms, de color listado, como las doncellas pero mucho más grandes. Un pulpo de unos 200 grms, Un langostino muy grande y un montón más de restos a medio digerir. Así estaba de grande. ¡Y aún tenía más apetito, como ha podido comprobar nuestro MAGNUM.

    Ramón presumiendo de barriga y de llubarro.

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    Mi tio pesando la pieza.

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    En casa mostrando el trofeo

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    Investigando sus costumbres alimenticias.

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    Aprovecho para desearos a todos un feliz año 2008.

  13. Enhorabuena. ¿Que lí­nea utilizas? ¿Y bajos...?. Por que para aguantar estos embites, por muy flojo que dejes el tambor del carrete seguro que tienes que llevar una buena lí­nea. ¿O quizás no...? Me gustarí­a mucho saberlo.

  14. Y OTRA MÁS EN EL DELTA

    Y es que el delta me tiene enamorado.

    Bajé con un amigo este miércoles pasado ( 4/7/07) a San Carlos y alquilamos una pequeña barquita.

    Uno de los trabajadores de la tienda de pesca en donde voy a comprar poco menos que se rió de mi cuando le dije que querí­a fluorcarbono de 1 mm para montar una lí­nea para cada uno de mis dos rapalas de 20 cms para pescar delante de la bahí­a.

    "Ponle rapalas de 13 cms como máximo, y con una lí­nea del 0,5 o más fina todaví­a o no te comerás una rosca".

    Con el tamaño de los rapalas no le hice ningún caso, pues pefiero pocos peces pero gordos, pero con la lí­nea sí­. Y el resultado ha sido que él ha vendido un rapalas más y yo he pescado un pez gordo menos (y por San Carlos hay un pez gordo que lleva un pircing incorporado).

    Y es que entre las 10 y las 11 en menos de 1 hora pesqué dos tallahams y un jurel de cerca de 1,5 kgs cada uno de ellos. Y varios más se me escaparon por que me tení­an amargado con el móvil desde el despacho. ¡En una de las ocasiones traí­a dos peces en la misma lí­nea. Uno en el rapala y otro en el Civelix que siempre le pongo a media altura, pero cuando ya los tení­a a menos de diez metros del barco sonó la m... del teléfono, dejé la caña instintivamente por unos segundos para decir que me llamaran más tarde y al aflojar, cuando quise reaccionar los dos se habí­an escapado para mayor cahondeo de mi amigo.

    Después de las 11 ya ni una sola triste picada más en todo el dí­a (hasta las 7:30 de la tarde).

    Adjunto una foto del tallahams del que hoy me he comido la mitad para comer. Los otros dos peces se los llevó mi amigo, que me ha prometido que antes de comérselos les hechará una foto. Prometo no salir más veces a pescar sin llevarme la cámara (estas son del móvil).

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  15. MADRUGADA DEL DOMINGO 1 DE JULIO

    Como estaba nervioso por marrones del trabajo y no me podí­a dormir, a las 2:30 de la madrugada cogí­ los bartulos y me fuí­ para el llobregat. Cuando llegué, después de recorrerme el espigón escondiéndome del vigilante (un gitano muy amable pero que te hecha sin contemplaciones) y de la mafia de trabajadoresobras-amigachos-oportunistasesquilmatodo que en cuanto te ven te tratan por lo simpático, pero a la que les das la espalda llaman al vigilante para que te heche, pues quieren "el coto" para ellos solos, ya eran más de las cuatro (Hay que recorrer más de 7 kms).

    Busqué un lugar más o menos escondido casi en la punta del espigón.

    Hasta las 5 nada. Entre las cinco y las seis aquello fué un auténtico festival.

    Tení­a una Grauvell 10-40 a fondo con un volantí­n de cuatro anzuelos del nº 2 especiales para besugos (muy grandes). En dos de los anzuelos tení­a un mejillón entero, en otro una sepieta y en el último una gambita (Todo congelado del macro, claro está).

    Mientras tanto, con la Grauvell 20-70 paseaba mi colección de rapalas de 13 y 20 cms.

    Era tanta la actividad que no podí­a estar por las dos cañas, pues aquella zona es muy peligrosa y si te caes al agua vas listo, por lo que debes estar bien concentrado.

    Con el volantí­n saqué un besugo muy grande, de unos 600 grms, así­ como un sardo de medio kilo. En dos ocasiones algún bicharraco grande-grande me arrancó el volantí­n petando la lí­nea, por lo que al final decidí­ dedicarme solo al spinning, que de hecho es lo que más me gusta.

    En la oscuridad, veí­a tras el rapala unas sombras negras que me aceleraban el corazón.

    Tuve un montón de ataques y persecuciones y cogí­ un jurel de 700 grms y un llubarrito de 900 grms. Cogí­ un par más que apenas pasaban del medio kilo y volvieron al agua.

    Es un sitio muy cansado, y de noche muy peligroso. Además, una de cada dos o tres veces que vas, si alguno de los mafiosos del lugar te clichan, llaman al gitano y este viene y te hecha después de amenazarte con llamar a la portuaria, a la guardia Civil etc si te vuelve a ver (solo le falta llamar al fari) .. y cuando acabas de pegarte una caminata de una hora y media, tener que empezar a recorrer de nuevo el camino de vuelta sin haber realizado ni un lance te hace una gracia... Pero aún así­, de vez en cuando me gusta intentarlo (es el sabor especial del riesgo).

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  16. Cristian, cuidado con los baños desnudo que como des con un tallahams grande y hambriento puedes perder peso... de un solo bocado. El fí­n de semana del concurso en riumar yo estuve con un amigo cerca de la zona de los eucaliptos haciendo unos lances desde la arena y saqué un palometón de cerca de 1 kg que devolvimos al agua. Tuvimos durante un buen rato a una barca de unos 4-5 mts con un toldilla blanca y varios spinners dale que te pego, muy cerca de la arena. ¿Erais vosotros por un casual?

    El fí­n de semana antes de San Juan alquilamos una barquita en San Carles y estuvimos curricando y spineando por el trabucador sin éxito toda la mañana, pero en la bahí­a tuvimos varias picadas que no engancharon. En 15 dí­as volveremos.

  17. VIERNES 8 DE JUNIO

    Un tio mio me invitó a acompañarles a pescar en Cubelles, justo frente a la térmica. Como el dí­a anterior ya habí­a hecho campana en el tajo, no pude ir a la hora que ellos habí­an quedado ni tampoco me pude quedar mucho rato, tan solo un par de horas, pero hice una entrada triunfal. Cuando llegué, todo el grupo de mi tio estaba ya pescando. Habí­a de hecho muchas personas pescando en una especie de laguna o pequeña ensenada artificial que hay a ponente de la térmica. Tengo entendido que es la ensenada que se construyó para que la térmica tomara el agua de refrigeración. Fué llegar, montar la caña, tirar, recoger... y a la primera se me enganchó una guapa aguja de cerca de 60 cms. La verdad es que en esta ocasión tampoco pude hacer foto por que pensaba que con el par de horas escasas que pensaba quedarme no pescarí­a nada y por ello no me lleve la cámara.

    Como anéctoda os diré también que habí­a un montón de pequeños palometones de apenas 100 grms que los pescadores que utilizaban boya cogian uno tras otro con pequeños trozos de sardina, pero volvian a soltarlos. También habí­a llisas por centenares (no exagero) pero tampoco casi nadie las querí­a. Finalmente, deciros que camuflado entre una banco de llisas, tocando la zona de entrada de aguas de la termica pude ver con mis propios ojos un llubarrote fenomenal. No menos de 3 kgs. No me equivoco (no era una llisa). No se asustó al verme, sí­mplemente se alejó. Le lancé el aparejo justo en sus narices y nada, ni caso. Utilicé un montaje de 2,5 mts de fluorocarbono con una Maria imitación sardina al final (al que picó la aguja) y un civelino colgando a un metro del Maria. Primero con Bull rag (con el que recibí­ la aguja), después con Bull dog y finalmente el aparejo solo. Un sitio bonito y pintoresco para visitar, pero muy concurrido, especialmente por los motos de agua toca c....

  18. UN PAR DE PARTES, SIN IMÁGENES PERO SIN DESPERDICIO

    UNA DE LUBINAS

    Un nuevo amigo que puso un anuncio buscando quien le acompañara a pescar atunes compartiendo un poco los gastos de combustible me invitó a pescar el atún en su barco, una preciosa Faetón de 11,70 mts de eslora. este pasado jueves 7 de junio. Quedamos a las 6 de la madrugada en la gasolinera del Port Olí­mpic. A las 5.30 ya estaba allí­, impaciente por la salida. Mientras esperaba, mi afán de llegar puntual me deparó una agradable sorpresa. De entrada, os puedo garantizar que las Lubinas que duermen debajo de la gasolinera del Port Olí­mpic son considerables. La primera de ellas me dió un susto de muerte. De repente pude observar como, de debajo del pantalán, salí­a un como un torpedo disparado hacia el centro del canal. Fué una acometida brutal, y tan rápida y tan a flor de agua que al avanzar sobresalí­a de la superficie la forma de la Lubina envuelta en agua desplazando también agua a ambos lados. Era como si literalmente un torpedo acabara de ser disparado en superficie. Impresionante. Me acerce con sigilo y pude observar que en aquella hora habí­a muchí­simos bancos de pequeños peces que pasaban justo por delante de la gasolinera, a ras de superficie, supongo que buscando la salida del puerto. De repente... Flaschhhhhh¡ otro torpedo, y otro, y otro más. Acomodándome a la escena, quieto como un p... al lado de uno de los surtidores, podí­a ver como las lubinas salí­an disparadas, se zampaban a algunos de los pezqueñines y volvian debajo del pantalan. Las habí­an de alrededor de un kilogramo, pero algunas eran mucho mayores. El espectáculo duró cerca de media hora, hasta que una de ellas me detectó y en aquel punto se acabó el espectaculo. Os aseguró que fué impresionante. Cuando el anfitrión llegó me explicó que sí­, que las habí­a enormes debajo de la gasolinera, pero que nadie las querí­a por cuestiones de "salubridad".

    ME METO EN CADA FREGAO

    Una vez embarcados, nos dirigimos hací­a un punto que no os sabrí­a concretar pero en el que habí­a un pecio hundido a unos 250 mts de profundidad. El patrón del barco, un auténtico apasionado de la pesca, llevaba la Faeton equipada a tope, con radar, sonda, sonar frontal, radios, Gps, Plotter etc. El barco navegaba a 25 nudos con 7000 vueltas gracias a sus dos motores de 450 HP. Era una gozada, excepto cuando pensaba en el consumo que aquellos motores debí­an acarrear. Por otro lado en su embarcación llevaba nueve equipos completos para pesca de costa, nueve equipos completos para la pesca de profundidad y nueve equipos para la pesca del atún, así­ como un número indeterminado de cajas enormes con señuelos y complementos de todo tipo. El sueño de cualquier pescador. Y nosotros, contándo al patrón, eramos cuatro en total. Los equipos, al igual que el barco, lo mejor de lo mejor. Ninguno de nosotros habí­a usado carretes electricos ni pescado a aquellas profundidades, por lo que el anfitrion tuvo que ponernos al dí­a, y con ello empezaron las sorpresas. En bastantes ocasiones, debido por un lado a su caracter explosivo y por otro lado a la obsesión que siente por la pesca y que no le permiten perder ni un minuto en cuanto se pone en marcha, sus indicaciones le salian a grito pelado y solí­an convertirse en duros reproches que rayaban la groserí­a. Fué un auténtico contraste de sensaciones, debatiéndonos entre lo que (al menos a mi) me parecí­a una cierta groserí­a por su parte al levantarnos la voz, y lo bueno que resultaba aprender tantas cosas en tan poco tiempo y con tan buen equipo. Era la primera vez que nos reuní­amos, no nos habí­amos conocido con antelación ninguno de los allí­ presentes y ante aquella avalancha de gritos nos mirábamos los unos a los otros con cara de sorpresa. La cosa no llegó al extremo del insulto ni fué necesario decirle hasta aquí­ hemos llegado... pero sí­ que tuve que que decirle un par de veces que se tranquilizara. En fin, una situación chocante. Nos topamos con un auténtico obsesionado por la pesca.

    BESUGOS Y BRÓTOLAS

    Una vez mar adentro nos dirigimos a un punto que tení­a marcado en su GPS y en el que habí­a un barco hundido a unos 250 mts. Su precisión para anclar unos 100 mts más al Este y con el borneo dar justo en el lugar marcado en el GPS fué magistral. En la primera subida hice un triplete con dos besugos enormes y una brotola. De fotos nada de nada. Si pierdo el tiempo sacando una cámara el patrón me cuelga del palo mayor o me hecha a los tiburones a la vista de lo que se enfadaba por lo que tardaba en embocar los trozos de sardina que usábamos como cebo. Me tení­a acongojado. En una de las recogidas, mientras subí­a unos besugos, noté un tirón bestial que me arrancó el bajo. Acto seguido, al patrón le sucedió igual. ¿Pero que hay allí­ abajo? Por que el bajo se suponí­a que aguantaba más de 50 kgs. No lo averiguamos, por que el patrón consideró que ya tení­amos bastantes besugos y demás nos fuimos a por los atunes. Fué toda una experiencia ver como se recoge un ancla tan pesada con 100 mts de cadena y 300 mts de cabo hundidos a cerca de 250 mts de profundidad. Lo hicimos con la ayuda de una enorme boya que usamos de pivote y con la potencia del motor que levantó al momento todo el equipo. Básicamente con la velocidad, el cabo fué deslizándose por la argolla de la boya y el equipo fué subiendo. Alucinante.

    JUANSANEROS

    A unos 35 millas de la costa pasamos el dí­a visitando puntos marcados en su GPS por anteriores capturas, pero las únicas que hicimos fueron atunes que no pasaban de los 10 kgs, a los que llaman SANJUANEROS, y que fueron devueltos al agua vivos y coleando. La multa por traerse a puerto a uno de estos pezqueñines es de unas 300.000 ptas, pues el peso mí­nimo debe ser de 30 kgs. El patrón estaba contento de mostrarnos estos atunes, pero lo que querí­a era uno de más de 30 kgs.

    ¿JIGGING?

    El patrón poco menos que se murió de risa que cuando le mostré mi Grauvell 20-80 y mi Stradic 4500 y le pedí­ permiso para hacer unos lances. Esto es para costa, neng, y aquí­ se te lo van a merendar me vino a decir.

    En fin, un dí­a chocante por el caracter impulsivo de nuestro generoso anfritión pero al mismo tiempo de maravillosa experiencia marinera. A las 9 de la noche en puerto, 125 euros de gasoil cada uno de los tres invitados como colaboración voluntaria ya prevista (un regalo realmente generoso pues seguro que gastó mucho más) y para casa.

  19. Pero supongo que estas hélices triples son artesanas... ¿O ya vienen montadas así­? Yo tengo un Yo zuri muy parecido, blanco y rojo, con una sola cuchara bastante grande. Solo lo usé una vez en un pantano y me fué de fábula, pero no lo he probado en mar. No tardaré en hacerlo.

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