Bueno, llevo tiempo sin participar en el parte, porque hace como cosa de más de un mes que no salía a pescar en serio, pues una intervención de miopía y una desastrosa gripe me han tenido en el dique seco.
El caso es que hace 3 días me animo a probarme, y me voy a primera hora de la tarde a una de mis zonas habituales. El mar casi como un plato y sin signos de actividad depredadora.
Decido empezar como casi siempre con señuelos de superficie, en concreto uno que desde que lo compre hace mas bien poco, me parece de lo mejorcito, se trata de un gunish de lucky, una maravilla.
Tercer lance, recogida con mucha acción, y torpedo que se dispara al señuelo desde una posición lateral, y que impacta de lleno, clavándose de inmediato y consiguiendo volcarme el corazón de la sorpresa. Pequeña lucha posterior, pero enérgica, y consigo sacar del agua un precioso palometoncillo de unos 1,5 Kg.
Lo que más placer me produjo es ver que tras unos segundos de mediolado en el agua, que se me hicieron eternos, se incorporaba y se largaba nadando a toda leche.
Anteayer probé de nuevo, lanzo en superficie y nada, posteriormente meto un aile magnet F CPL 105 mm y buena picada, consigo desde escollera apoyar al dorado sobre una roca baja, pero la anjova de unos 3 Kg, estaba demasiado viva. En el intento de liberar al animal casi me mato, se roza el bajo y se rompe, cayendo al agua el dorado y mi señuelo
Al cabo de un rato nueva picada a un Husky Yerk 12 cm blanco-perla. Lo veo saltar una vez, es el hermano gemelo del anterior, decido agotarlo para ver si lo puedo sacar sin peligar mi integridad física. Al cabo de 2-3 min, me corta, no se puede dar cuartel a estos bichitos.
De todas formas me voy a casa como si los hubiera sacado, porque si no lo he hecho es porque no he querido ganchearlos, y no llevaba sacadera.
Bueno, un saludo a todos y buena pesca.