SURFACE TENSION - La evolución de un viejo conocido
Esta es una de esas cosas que han llegado a nuestras manos de forma espontánea.
La historia nace con la llegada de un correo electrónico de la mano del fabricante - Line Stretcher - unas cuantas líneas, unas pocas fotos de un nuevo señuelo y de algunas capturas.
Tanto la forma como los colores no traían nada nuevo y destacable, más bien daba la sensación de ser otro inventillo de esos que salen cada semana de una factoría china que al final no acaban siendo más que una imitación regular de algo que funcionaba, pero al ver que la dirección de contacto estaba en Masachusets, quisimos saber un poco más. Mandé una espuesta y solicité unas muestras para poder probarlos.
Unas semanas más tarde llegó una cajita con 4 de los bichitos en cuestión (casi al mismo tiempo que una cámara de fotos que tenía en la lista de los deberes), por lo que los animalitos se llevaron los primeros disparos, sin experiencia, sin luz suficiente y con muchas ganas:
La presentación es buena, los acabados más que aceptables, incluso mejora en algunos aspectos al viejo conocido, equipado con mejores anzuelos, ojos y una banda brillante.
Sin la bolsa de plástico se pueden apreciar mejor algunos de los detalles como los ojos, que en cualquier caso, enriquecen la aparente simplicidad del artilugio.
A primera vista ya vemos que se trata de un señuelo de superficie, de los que podemos clasificar en el grupo de los "skipping", los que navegan dando pequeños saltitos sobre la superficie del agua, produciendo salpicaduras de forma continua, al tiempo que se abre paso dejando una estela. Llama la atención el canal central, que va de más a menos, decorado con un adhesivo reflectante, del que ya veremos sus virtudes.
Decir para la pesca de que tipo de depredadores está indicado, va a depender más del pescador y el entorno que no de lo que se pueda decir aquí, pues cuanto más buscas, más especies diferentes se suman a la lista. En definitiva, este tipo de señuelos es perfecto en nuestras aguas para anjovas, palometones, llampugas, bonitos, lubinas, barracudas, espetones, ... y en el trópico, la lista se puede hacer interminable, pasando por el pez vela, gallos, jacks, trevallys, ...
En la siguiente foto se pueden apreciar mejor las dimensiones:
Al día siguiente, la mejor forma de salir de dudas, ponerlos en remojo:
El más pequeño y el hermano mayor: lo comentado sobre la calidad de los anzuelos:
Siempre es de agradecer que si el precio los incluye, al menos que sean buenos.
Las pruebas:
El lance
Solo viendo la forma y la distribución de pesos al sostenerlo en la mano, nos podemos hacer una buena idea de lo que va a suponer el lance del Surface Tension, la forma aerodinámica lo convierte en un verdadero misil y difícilmente pierde la postura natural de vuelo.
Lo probamos con un par de cañas de marcas diferentes, pero de características similares, una Carpenter BC73MLR y una Smith GTK73SJ, en ambos casos y probados por personas distintas, con un poco de técnica no fue difícil enviar las 2 Oz a más de un centenar de metros del barco.
El aterrizaje bastante bueno, aunque sigue siendo recomendable frenar la salida de hilo un segundo antes de que toque el agua, de esa forma evitaremos que la inercia generada en el lance nos saque alguna vuelta suelta del carrete. Esto para su antecesor era imprescindible para evitar que se hundiera demasiado rápido y hacernos perder esos primeros metros, tan críticos como efectivos para tener buenos ataques.
Acción / Recogida
Al principio y acostumbrados a otros señuelos similares, es fácil caer en el error de recoger a toda velocidad, pensando que de otra forma es imposible mantenerlo en la superficie, algo que es fundamental para este tipo de artificiales, pues cuando se hunden pierden una parte importante de la acción.
"Voilá"; esto es diferente, el canal que mencionaba al principio tiene la función de conducir el agua, levantar el morro y agachar "el culo"; eso que hace que el Surface Tension se mantenga en la superficie con mayor facilidad, sin necesidad de imprimir tanta velocidad para aguantarlo (cosa que van a agradecer nuestros antebrazos) y algo mucho más importante, va a descender el número de ataques fallidos, pues al navegar más lento les será más fácil alcanzarlo a los depredadores.
Los saltitos erráticos, los salpicones y la estela, lo convierten en un auténtico levantador de presas.
La técnica para darle acción, como ya indicábamos, empieza por detener la salida de hilo un segundo antes que el señuelo toque el agua y evitar que quede línea suelta o en comba, empezar a girar la manivela del carrete lo antes posible y con la puntera de la caña levantada hasta lo más alto.
Empezar a recoger con una velocidad rápida, sin dejarnos el alma en ello y a medida que le vamos cogiendo el truquillo, vamos decelerando y acelerando, según deseemos crear mayor o menor chapoteo y escándalo en superficie.
Se trata de una recogida lineal, apuntando con la puntera de la caña hacia el señuelo, aunque como hemos dicho, empieza con la puntera totalmente levantada, para que a medida que se va acercando a nosotros, iremos bajándola, hasta que al llegar a nosotros, prácticamente estemos tocando el agua con la anilla de la punta.
En la siguiente foto, lo que se ve es un fantástico ataque de una anjova que hizo volar nuestro Surface Tension.
Y aunque pueda parecerlo, no se trata de un ataque fallido ... es que no lleva anzuelo !
El ataque y la clavada
Cuando estamos pescando con este tipo de señuelos, nos pueden pasar diferentes situaciones, de las que vamos a ver las dos más comunes:
Que se produzca una explosión espontánea e inesperada, motivada por que el depredador ataque desde abajo y no le veamos; que esté muy lejos, en esos primeros metros después del lance o por que las condiciones del agua nos lo impidan ver (olas, rompientes, espuma, ...). No podremos predecir que se va a producir un ataque, en cuyo caso no podremos hacer nada más que esperar a notar la tensión en la línea para levantar de un golpe seco la puntera para dar el cachete y clavar la pieza.
La sombra del depredador, la rotura de la estela que deja el señuelo, los continuos salpicones, un prominente lomo fuera del agua o la aguda vista que proporcionan las gafas polarizadas, nos avisan que alguien se ha interesado pero que no se acaba de decidir por comérselo. En este caso será necesaria nuestra intervención para provocar el ataque.
Hay diferentes teorías sobre que hay que hacer en estos casos y hay que apuntar que ninguna es la definitiva y la suma de varias puede ser la solución, aunque hay que indicar que en muchas ocasiones y en relación proporcionalmente directa con el tamaño del animal, llegarán hasta nosotros sin decidirse, solo curioseando e investigando la clase de artilugio con el que les queremos engañar.
Un par de ellas son:
Parar el señuelo: Se consigue dejando de recoger en seco, al tiempo que bajamos la puntera de la caña para liberar de tensión la línea. Esa parada suele hacer que el pez tropiece con el señuelo, siéndole más fácil abrir la boca y engullirlo que esquivarlo. Cabe destacar el hecho que al parar, este señuelo se hundirá, por lo que también le será más fácil morderlo.
Cambiar la velocidad: Disminuir o aumentar la velocidad de recogida de hilo (de vueltas de manivela), incluso alternando acelerones y paradas. Al acelerar, la presa cree que se le escapa y se decide a lanzarse.
En cualquier caso, se hace indispensable contener el instinto y frenar el impulso de intentar clavar tan pronto como vemos que el agua explota, a eso se le llama clavar de vista y suele ser la forma más fácil de sacarle el señuelo de boca y perder lo que con muchas posibilidades hubiera sido una captura. Por tanto, cuando suceda la explosión, se deberá esperar a notar que la captura nos tensa la línea e intenta sacar hilo, para entonces ser raudos en aplicar el cachete que clave el anzuelo en el pez.
Dicho todo esto, me queda poca cosa más que añadir. Seguro que alguno tendrá más ideas que se pueden hacer con este tipo de señuelos, recuerdo mis tiempos en que hice muchas pruebas con los Rangers, añadiendo triples, poniendo pulpitos o cambiando los anzuelos, incluso con assist hook. Quizás sea momento para volver a aplicar aquellas modificaciones a este nuevo y ver como afectan los resultados, pero eso ya será tema para el siguente bloque.
Unas fotos más, ahora ya con los resultados:
Es muy posible que lleguen en pocos días por lo que muy pronto se podrá adquirir en España, sin necesidad de buscarlos en tiendas de USA y sin problemas de aduanas y estarán disponibles en más colores, azul, verde, morado, ...
Va a ser un titular en nuestras cajas de señuelos, con la ventaja de tener un precio muy contenido (entre los 7 y 8,5 € según tamaño) y con una calidad suficiente para resistir los ataques de los depredadores con los dientes más afilados.
Ahora os toca a vosotros hacer los comentarios que creais sobre este nuevo juguete.
Pep
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