Bueno, el martes no toqué pelo en los roqueos del paseo del candado, pero cuando iba a dar la vuelta con el coche a la altura de la araña vi toda la playa llena de pescadores y ¡todos rapaleros! Pues estaban cogiendo un montón de jurelitos muy chicos, con las plumillas y plomo al final, desde el atardecer hasta la noche, el miércoles fui yo y cogí una caballa de 32 cm y un jurelito de los muchos que se cogen allí y que fue devuelto al agua ante el asombro de más de uno, si váis allí, por favor, respetad las tallas mínimas, recordad que la del jurel son 12 centímetros pero bueno, vosotros que sois pescadores, me imagino que compartiréis conmigo que es bastante ridículo, bueno, que... eso, que cada uno es libre de hacer lo que quiera, un saludo y a ver si nos organizamos para hacer una quedada.