El año pasado me pasó una historieta similar. Previamente los de la náutica, mientras montaban motor y demás hicieron la solicitud y ya me pudieron decir (por tfno) el número de matrícula, con el que formalicé el seguro. Me mandaron (e-mail) la póliza y me imprimí el recibo (el banco on-line tiene ventajas).
Total que vamos a la náutica y me dicen "mañana ya lo puedes venir a buscar". Mañana era un viernes. Como la náutica cierra el sábado, la única alternativa para poder salir algo el finde era ir ese viernes.
Nos desplazamos el famoso viernes y nos encontramos conque los papeles no están (ningún papel), que hasta la tarde no iban a estar. Nos habíamos desplazado 50 km para luego llevar el barco por la mar. Dilema gordo. Nos dijeron que lleváramos el "comprobante" de que estaba hecha la solicitud. La verdad es que nos la jugamos porque teníamos que llevar el barco desde Raos (Santander) a Colindres por vía marítima (20-25 millas más o menos).
Como no nos apetecía volvernos para casa con la cara de tonto (había pedido el día en el curro) nos arriesgamos, cogimos el barco y marchamos. Si nos llega a parar la patrullera seguro que nos hubieran metido un multazo. Y lo cierto es que los de la náutica nos deberían haber dicho que no nos lo lleváramos. Pero ni ese consejo nos dieron. Poca formalidad. Es igual que si no se aseguran de que el barco tiene el equipo de seguridad obligatorio. Por lo menos el "fijo" tipo reflector de radar, amarras o cosas así. Te dejan salir, te para la patrullera y te embarban una multa, creo que la náutica comparte una buena parte de la responsabilidad (aunque al final la multa te la ponen a tí).
Un saludo y ni se te ocurra salir sin documentación